martes, 16 de octubre de 2018

PARA JAMAS OLVIDAR, MENOS AUN, PERDONAR



Javier Del Valle Monagas Maita

Los ataques contra el pueblo venezolano a partir de 1973 cuando el nefasto CARLOS ANDRES PEREZ, era presidente de Venezuela, y que comenzó como una aparente bonanza económica-petrolera, que terminó hundiendo a Venezuela en una deuda bestial, mientras, paradójicamente, le entraban caudales de dólares petroleros, gracias a los precios del producto, pero que así como entraban, eran derrochados y desviados a las cuentas particulares de los políticos de turno, de la burguesía parasita criolla y el resto se repartían  altos cargos del FMI- BM y los capos del crimen organizado Sion capitalista.  Debo decir que de esa deuda Bestial, solo el 20% fue aportado al país físicamente. El resto se quedó en el camino, en los desvíos naturales de las comisiones, pre intereses y post intereses. Amén del supuesto engaño denunciado por el borrachín Jaime Lusinchi, cuando dijo que lo engañaron con un oneroso refinanciamiento de deuda y la obligación de asumir toda la deuda de los cínicos ladrones y parásitos seudos empresarios burgueses venezolanos.  Hasta el mismo pueblo se emborrachó y una gran porción viajaban  diligentemente al exterior, derrochando dinero a manos llenas y malbaratando todo lo que ingresaba al país, sirviendo de comparsa y complicidad a los buitres que le tendieron la trampa al país. Incluso poniendo de moda frases grotescas desde Miami y otras ciudades del mundo, del “ta´ barato, dame dos”
    Allí comenzó a trampa apara apoderase de Venezuela, por parte del crimen organizado Sion capitalista global y que tuvo su elipse mayor durante el segundo gobierno del otro degenerado y nefasto gobierno de Rafael Caldera. Quien pese al sacudón de 1989, usó el engaño y la manipulación para imponer un paquete económico, peor que el proyectado por CAP  y que dio origen a la explosión popular ya mencionada de 1989.
     Desafortunadamente para esas mafias transnacionales del crimen organizado Sion capitalista yanqui-europeo. Se les atraviesa en el camino un factor emergente no previsto; Hugo Chávez Frías y una inmensa masa popular que no se resignó, pese a la masacre del 89. Y a la opresión bárbara impuesta por el inefable Rafael Caldera II.
     Ante el nuevo panorama expuesto en Venezuela por Chávez y el pueblo, el crimen organizado Sion capitalista, se restea en la aplicación del terrorismo. Sicariato, la guerra sicológica, económica, política y mediática. Se fue mutando y, estableciendo nuevas metodologías y sistemas de aplicación más malignos y mortales. Ya no bastaba el criminal plan aplicado al Chile de Allende, Guatemala de Arbenz, a la Cuba socialista, la Nicaragua Revolucionaria, el Salvador rebelde. Ellos conjugan todos esos planes perversos y  aplican un terrorismo desde los estados mismos yanquis, colombianos y europeos. Gobiernos involucrados directamente en el ataque feroz contra una sola nación. Desde Colombia el narco paramilitarismo, el sicarito y el terrorismo se traslada a Venezuela para atacar directamente al pueblo, -Hacienda Daktary. Captura de 200 paramilitares colombianos con planes de atacar a Miraflores y asesinar a Chávez. Organización y creación de bandas criminales muy sanguinarias y la aplicación de métodos de terrorismo nunca vistos en el país como despedazamiento de personas con motosierras, asesinatos con saña, incluso de altos funcionarios y diputados, etc. Incluso se hacen intentos de crear un ejército mercenario con paracos de Colombia, bajo la guía de Álvaro Uribe Vélez y su carnal Juan Manuel Santos, bajo la batuta del propio gobierno Norteamericano de George W Bush, continuado luego por Obama y ahora el misógino y enfermo sexual Donald Trump. Lo que da una connotación de degeneración del estado Sion yanqui en la parcelación abierta y directa del alto ejecutivo en operaciones de ataques a otros estados.

 En toda esta madeja de crimen y maldad, es el pueblo venezolano el más atacado. Al punto de esconderle la comida, medicina, saboteo de los servicios públicos, guerra psicológica  con inducción al homicidio, genocidio y suicidio. Lo empujan a abandonar el país y desertar de sus trabajos, dejar sus profesiones para ir a otro país a limpiar baños y ventas ambulantes de chucherías, comidas chatarras. Y trabajar como esclavos con sueldos miserables y hasta por 18 horas diarias. Sin ningún derecho o garantía laboral. Detrás de esto se buscan quebrar la voluntad de pueblo a resistir el colonialismo invasor degenerativo e impuesto.
     Todo eso y más, han hecho la burguesía venezolana, el Sion imperialismo yanqui y unos gobiernos lacayos que tienen a sus pueblos en la precariedad y dolorosa miseria inhumana, como Chile, Colombia, Argentina, Brasil, México, Perú, etc.
      No nos quebraran nuestra disposición de ser soberanos y libres. Con esos criminales apagones, esos secuestros de nuestros derechos humanos, los miserables gobiernos de EEUU EUROPA Y algunos lacayos de esta regio, No podrán vencer.
¡VENCEREMOS!
*Abogado con Patria
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