La verdad sea dicha: llamar “maricòn” a quien elige esa tendencia sexual no es ofensa

Javier Del Valle Monagas Maita (*) ¿Quien no ha visto las manifestaciones públicas de los maricos, las lesbianas, y los tercerizados sexuales (Tercerizados, por que juegan para los dos equipos)? Allí ellos y ellas, exponen abiertamente su inclinación y lo único que exigen es respeto. Son honestos consigo mismos y con la sociedad, al declarar abiertamente su condición. Pero cuando un zángano politiquero, golpista mal sano, ladrón y delincuente violador hasta del derecho internacional, es llamado por su inclinación sexual. Misma que queda delatada debido a un procedimiento policial muy efectivo, además de otras razones gestuales. Entonces se prenden todas las cotorreras hipócritas, llamando discriminador a quien llama al pan por su nombre. En Derecho, las denominaciones y connotaciones de las palabras son dadas en base al significado y la conducta. Así el que mata se le llama homicida, asesino; de igual forma el que se apropia ilegítimamente de algo ajeno se le llama ladrón. De la misma manera, en el lenguaje coloquial o del vulgo (pueblo) el hombre que le hace la felación a otro, se le denomina maricòn y eso es aceptado así por la sociedad. En otras palabras, las cosas, conductas y tendencias tienen su clasificación y aprobación colectiva. No es racismo, ni discriminación entonces, decir que Enrique Capriles Radonski es marico. Un acta policial es suficiente aval para tal cosa (a menos que se demuestre que ha sido una invención, y ese no es el caso aquí) quien falta a la ética y a la verdad, es quien deliberadamente oculta lo que es obvio. Un político, debe reflejar a la opinión pública que es sincero, responsable y honesto. Eso va para todo. Ocultar las cosas, tendencias sexuales, y no cumplir con la responsabilidad que la sociedad le asignó de ser el gobernador de un estado, es un síntoma del peligro que representaría esa persona en un cargo de tanta responsabilidad e implicaciones como lo es, el de presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Es responsabilidad del cargo de presidente, velar por la independencia, soberanía y libertad plena del territorio y sus acciones nacionales. Garantizar el bienestar colectivo desde el punto de vista educativo, cultural, social, económico, político, salud, vivienda y paz. Que los recursos naturales del país sirvan para generar ese bienestar nacional. Que el estado – nación, sea el principal dueño y explotador de esos recursos nacionales, a los fines que sus ganancias sirvan para apuntalar esas garantías. Un candidato que esté al servicio de una potencia extranjera, que acepte financiamiento de esa potencia, que reciba asesoramiento de los sectores más terroristas y depredadores del pueblo colombiano, de un ex presidente que se caracteriza por ser el jefe del narco trafico de su país como Álvaro Uribe Vélez, que incluso tiene un expediente y clasificación (narco traficante nº 82 del mayor cartel de narco trafico del mundo como lo es la DEA) http://forosdiariodeoriente.wordpress.com/2009/09/03/la-dea-tiene-clasificado-el-expediente-numero-82-contra-alvaro-uribe-por-narcotrafico-y-labado-de-dinero-la-oscura-trama-secreta-de-las-7-bases-gringas-y-el-retiro-de-la-investigacion-de-la-dea/ http://xa.yimg.com/kq/groups/17017112/1197576571/name/EL%2BNARCOTRAFICANTE%2BN%25C2%25BA%2B82%2BALVARO%2BURIBE%2BVELEZ%2B-PRESIDENTE%2BDE%2BCOLOMBIA[1].pdf Y reconocido promotor del paramilitarismo que ha costado tanta sangre y dolor al pueblo de Colombia. No puede aspirar a regir un país y mantener su independencia, dado el compromiso adquirido al aceptar semejantes apoyos y sabiendo como sabemos los venezolanos como cobran esos apoyadores sus servicios. En fin, un candidato presidencial, que mienta, que desprecie la idiosincrasia del pueblo venezolano, que no respete el orden jurídico nacional e internacional. No puede jamás ser presidente de esta nación. Entonces, ser maricòn, no es el delito de Capriles Radonski, por que simplemente eso no es delito ni está tipificado como tal. Pero lo otro, lo de ponerse al servicio de intereses diferentes a los de Venezuela, recibir dinero, para la campaña electoral, conspirar contra la constitución y el orden jurídico nacional. ESO, eso si es un delito grave. Incluso el señor Capriles, es cómplice de genocidio, cuando participó siendo alcalde abiertamente en el golpe de estado del 2002, que costó la vida a muchos venezolanos, al igual que su organización partidista. Aquí queda esta breve descripción de los reales delitos del maricòn de Capriles Radonski, quien no está facultado para ser presidente de un país que irrespeta, engaña, roba y traiciona desde siempre. Desde que era miembro de una secta fascista y satánica denominada “tradición, familia y propiedad http://poderenlared.com/2012/03/05/capriles-radonski-la-secta-tradicion-familia-y-propiedad-y-el-lobbie-judio/ (*)Abogado Bolivariano javiermonagasmaita@yahoo.es www.planetaenpeligro.blogspot.com / lo que será Facebook: Javier Del Valle Monagas