Pablo Ballesteros
Todos
los meses o cada quince días recibimos Punto Final, sin duda el único periódico
en nuestro conquistado continente que denuncia y desnuda porfiadas dictaduras
asesinas que gobiernan disfrazadas como monas democráticas el territorio que no
le pertenece ni le pertenecerá para siempre.
Nuestro
grupo reunido en el Núcleo de Estudios Políticos Indo-Latino va construyendo
mapas de barbarie practicada religiosamente con la liturgia bestial por
desclasados, monigotes, mercenarios, siervos desgraciados del gran capital
imperialista; gracias a materias históricas que trae en sus páginas nombres y
sobrenombres de héroes jóvenes masacrados por militares disfrazados de chilenos
que odian chilenos Libres y tal vez de Buenas Costumbres, a hombres y mujeres
tostados por el sol o pálidos por la oscuridad de las minas o curtidos de sal
de tanto navegar por costas hermosas como curvas de la niña que amamos a los
15, 20 años hasta el día de hoy o tristes profesoras y profesores reducidos a
categoría de catequistas alfabetizadores o llorosos médicos que se les mueren
sus pacientes en calles, corredores de hospitales sin remedios ni camas ni nada
que pueda salvar vidas.
Chile
tiene varios Chiles: senadores gordos como sapos, diputados cubiertos de pus
sudando pus de corrupción y traiciones; pobres cada vez más empobrecidos e
analfabetos que perdieron por miedo la coraza de la historia de la Patria, otro
montón de individuos consumiendo lo que no necesitan para alimentar al dios
mercado creyéndose clase media, cercanos a minúsculos y pocos ricos que se
defienden con ejército alienado entrenado para matar lo más noble de 500 años:
la Nación Mapuche y obreros que dieron y dan progreso a la Patria.
La
dictadura nazi-fasci-franquista consiguió, junto con asesinar miles de chilenos
de verdad, corromper hasta la médula nuestra loca, riquísima y hermosa
geografía cuyo producto resulta en la desaparición de partidos políticos
ideológicos progresistas de izquierda, cambiar el rumbo ético sindical de la
CUT, transformar las iglesias en cómplices o monasterios de silencios y
pedofilias frente a la deshumanización de la vida diaria, borrar el futuro
soñado por nuestros héroes de ayer y de hoy dejando un hueco negro para nietos,
bisnietos y por ahí van.
Desde
1990 Chile viene reptando frente al ídolo mercado, de rodillas para oir y
cumplir órdenes absurdas e idiotas del capital como condenar Venezuela por
atreverse a construir su futuro libre de colonización y analfabetismo,
aprovechando ser el segundo país con mayor cantidad de petróleo ambicionado
cobardemente por USA-Sion y otras porquerías.
Núcleo
de Estudios políticos Indo-Latinos. 24/02/18
Nuestro
Chile de cielo azulado está prisionero de gobernantes sin patrias y
legisladores ladrones, empresarios e industriales al servicio del extranjero
bélico; cruzan su tierra cordillerana y de valles de oro como el trigo maduro
brizas de odio e injusticia (la justicia de Kant, Hegel y otros no existe más:
murió en el abismo del miedo) y ese mar que era tranquilo y nuestro ahora es de
un puñado de oligarcas sin aristocracia moral. En fin, tenemos, debemos
comenzar ahora la construcción de la Fuerza Política con elementos patriotas de
los valerosos movimientos sociales.
Generales,
coroneles, mayores, capitanes, tenientes, sargentos, cabos y soldados fueron
muy valientes fusilando por la espalda a chilenos. En una guerra saldrían
corriendo como gallinas locas porque son cobardes, sólo atacan a quienes no
tienen armas, más ideas civilizadas y progresistas. Andan tomando sol por
playas, avenidas, plazas y prostíbulos secretos, pero no tan secretos. Ese es el
ejército chileno del bandido Pinochet y compañía. Soldados que obedecieron órdenes
imbéciles y criminales también deben ir a la cárcel o ser punidos por el
pueblo-pueblo.
¡VENCEREMOS!
*Abogado con Patria
https://planetaenpeligro.blogspot.com/2018/02/horror-de-horrores.html
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