Ellos degradan la condición humana para imponer sus aberraciones

Javier Monagas Maita
La etapa inicial para imponer la dominación sobre otras personas, es la de minimizar o destruir la auto estima, su cultura y la solidaridad. Reventar ese don natural de los seres humanos según el cual se es capaz de lograr las metas con disposición, confianza y preparación. El capitalismo bombardea mediante el racismo, la discriminación y la negación de la educación liberadora, entre otras cosas; esa confianza y capacidad de los individuos para auto impulsarse a la superación espiritual y material, pero con armonía. Por eso impusieron las clases sociales, los elitismos, los falsos valores y la destrucción de la moral, sustituyéndolas por creencias basadas en la acumulación de riquezas, bienes y cosas en su mayoría inútiles e innecesarias que al final acaban por poseer al presunto poseedor.
Denigrar de la dignidad humana, es una perversión que en el capitalismo se impone como show mediático de entretenimiento. Para ello la televisión se ha convertido en un vehículo demoledor y efectivísimo para la tarea. Por ejemplo, vean el canal de televisión Venevision plus. O el canal de las estrellas mejicano o televisa. Allí presentan un basural ofensivo y denigrante de la condición humana, tan aberrante como las torturas de Guantamo o de Abu grahid hechas por el ejército y el gobierno Norteamericano o el Mossad Israelí.
Los supuestos protagonistas, tanto del drama degradante como sus presentadores, son cubanos gusanos batisteros o engañados por la propaganda yanqui del sueño (convertido en pesadilla) americano, o en su defecto mexicanos, dominicanos, puerto riqueños , incluso hasta Venezolanos idiotizados, enganchados por los estafadores mediáticos al servicio de la CIA, o los medios de comunicación privados, capitalistas, de esos países. Son muchos lo desdichados programas, y lo mas triste, es que hasta en los CDI, oficinas gubernamentales e instituciones educativas venezolanas, los ponen a pleno volumen y en sintonía permanente.
No acabo de comprender como unas personas se divierten viendo como vejan y humillan a los pobres personajes que presentan en esos cochinos programas. Indudablemente que existe una carencia total de valores y auto estima, en quienes ven esas porquerías, tan solo por el morbo de ver ofender a otros. Penosamente debo decir que generalmente son personas de bajo nivel cultural, educativo y económico, los que exponen vulgarmente en las pantallas de esos medios pervertidos llamados tall show. Lo mismo que tampoco puedo entender como las personas cuerdas, pueden comprar los productos que patrocinan semejante bodrio.
El capitalismo siempre ha jugado a la destrucción de la conciencia de las personas. Ese método, les permite convertir a la gente en robots o maquinas, que hacen y se comportan como les dictan las pautas publicitarias. Esa es la esencia de las modas, que convierten una necesidad básica de protegerse de la intemperie; en un vulgar comercio. De esa misma manera es que se inventaron las diferentes religiones y sus símbolos mercantiles, de cruces, anillos, ropas, comidas, bebidas, muñecos, velas y frasquitos de agua pendeja, bendecidos por sádicos violadores de niños, que cobran por supuestos servicios de fe y salvación del alma.
No hay duda el capitalismo es la perdición de la humanidad y sus valores básicos. Ni siquiera los enfermos que se enriquecen de esa perdición o droga, están a salvo. Al final terminan siendo poseídos por las falsas riquezas que dicen tener. En estos días el máximo expositor, degradado y degradante, el sionismo y sus lacayos adoradores de piedras frías y sin espíritu. Son esos asesinos que invaden pueblos y países para saquearlos o, despojarles sus territorios. Solo deben mirar a medio oriente, África, Palestina, Panamá, Colombia, México o USA.
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