lunes, 27 de mayo de 2013

Lo que decimos y lo que nos responden, o quizás ¿que decimos y que no hacemos?


Javier Del Valle Monagas Maita (*)

      En aquellos días, después de estar secuestrado, de ser acosado y encerrado por un grupo de avariciosos criminales, concertados. El día 14 de abril del año 2002 en la madrugada, a su retorno, ese hombre dijo besando un crucifijo, recuperando el poder en sus manos: “por dios los llamo a recapacitar, a entender que este país es de todos…” (Cita no textual). Esas palabras no fueron valoradas, no fueron respetadas. Al contrario fueron interpretadas como un gesto de debilidad.  Como no hubo consecuencias legales y serias por aquella conducta criminal y desoladora del país. Lo que siguió fue una nueva arremetida más destructiva, criminal e indolente contra la nación y su pueblo, a través de un lockout económico.  Una vez derrotada esa cruenta arremetida de los hijos del imperio asesino sionista yanqui, continuó la impunidad. El perdón, y el dolor en el pecho del pueblo que volvió a poner las victimas y sus victimarios quedaron  sin castigo.
     Nuevamente se dijo desde el gobierno que era necesaria una conciliación real, sin condiciones, sin privilegios, en franco acatamiento de  la Constitución y de las instituciones del Estado.  Lo que se recibió en respuesta fue más agresiones de grupos fascistas de estudiantes, un grupo de inmorales generales chulos y puercos, en una plaza publica en Chacao, haciendo una bacanal. Donde la droga, la prostitución, la gula y el tráfico de influencias  servían de fuente de  maldad. Hubo asesinatos, violaciones, tráfico de armas.  Alguien dijo “déjenlos que se cocinen en su propia salsa”. Pero mientras se cocinaban,  daban al traste con el ordenamiento jurídico nacional, ya de por si maltrecho por tanta impunidad y desidia.  Al final de ese dantesco acto, nuevamente las sombras de la injusticia reinaron en la Venezuela revolucionaria.  Los hijos de papá y mamá, los generaluchos sin honor, sin patria, sin tropas  y sin dignidad, los politiqueros que antes cometieron actos criminales pelaron el diente se fueron pal’ carajo, en algunos casos.  en otros, se quedaron y siguen jodiendo alegremente, al punto que uno de ellos el 14, 15, 16, 17… de abril del año 2013 -  11 años después de haber hecho algo igual - provocó deliberadamente la muerte de más de una decena de asesinatos, más de setenta heridos, muchos centros de salud destruidos o incendiados, actos vandálicos y de terrorismo, etc. Pero la justicia, las instituciones encargadas de velar por que se respeten las normas y sus preceptos,  voltean la mirada a la luna o, se dedican a mirar corrupción – que si la hay, pero es menos condenable - en lugar de ver el horrendo genocidio pre concebido ordenado a través de los medios masivos  de comunicación nacional, en un hecho público y notorio sin precedentes.  Una acción que en otros países ha activado a los tribunales, que han condenado a penas contempladas como delitos de lesa humanidad.
      ¿Qué esperan? ¿Los dejaran otra vez que se cocinen en su salsa y después los perdonamos? ¿Qué les dirán a los hijos, madres, esposas, padres, esposos, nietos, abuelos, etc. de esos asesinados y los decenas de lesionados que quizás ya no puedan llevar una vida normal?  ¿Esperaremos diez, once, doce años, para homenajearlos en la asamblea nacional (si es que existimos para entonces, gracias a la impunidad) y decirles que son unos héroes?, mientras sus asesinos, sus cómplices y quienes los protegieron andan jodiendo por la vida sin sanción ni castigo alguno.  Incluso, les seguiremos vendiendo petróleo a las empresas del amo que nos manda a asesinar reiteradamente, para que muevan las maquinas de muerte con las que asesinan a los pueblos aliados, a los gobiernos amigos, a los países hermanados con nosotros, incluso con las que mueven los instrumentos para asediarnos a nosotros mismos.
      Señores, la retorica no da dividendos, solo cansa y se convierte en monotonía, incluso nos resta credibilidad ¿no es posible una vida soberana sin USA? si sabemos que el Sion imperio yanqui, nos agrede desde diferentes flancos, ¿si sabemos que usan sus fichas internas y externas para atacar al pueblo y al país, si reconocemos que tienen medios internos de agresión a su servicio, si sabemos a quienes, como, cuando y donde les dan dinero para hacernos daño, si reconocemos los canales de televisión, los periódicos y las emisoras de radio por los cuales difunden su terrorismo mediático e inoculan sus mentiras? ¿Por qué coño no se toman medidas contra ellos? ¿No estamos acaso en capacidad de entender que esos instrumentos son armas de guerra con las que nos ocasionan bajas en todos los sentidos? ¿No entendemos que nos están enfermando a la juventud, nos los inducen a la droga, a la delincuencia, a la pornografía? ¿Qué esperamos para reaccionar? ¿Creen que con reuniones con los agentes de ese imperio, y que están comprados, dejaran de atacar al país y al proceso? ¿Es que no han dado muestras suficientes, esas alimañas. De que no les importa la vida de pueblo? ¿Acaso creemos que Cisneros (amigo intimo de los asesinos Bush), Camero,  (con residencia en USA) o los cómplices banqueros y empresarios como los Mendoza, los Zuloaga, etc. Se les ablandará el corazón con una reunioncita? ¿O por que se  ponen firmes delante de Maduro?  Nojoda, no seamos incautos. No ven que ya nos esconden la comida, los repuestos de todo, nos sabotean los servicios públicos, nos acosan políticamente, mediáticamente y nos asesinan gente del pueblo cada vez que quieren y nada cambia., fíjense en la programación de la Tele, Venevision, Televen y otros canales regionales, no digamos los  que vienen por las cableras. Como nos atosigan con programas colombianos de  violencia, sexo, show hablados, noticieros.  Nos ponen en el frente de ataque desde Colombia a Álvaro Uribe, un narco terrorista, ex presidente, asesino nato, que dejó tras de si, cientos de cementerios clandestinos. Que es un narco paramilitar, y ahora  consentido del grupo sionista Fox.  
       Si tenemos el poder, hagámoslo valer, pasemos al ataque, terminemos de una buena vez por destruir las estructuras o bases políticas, económicas que los sostienen.  No le mintamos al pueblo, digámosles que no será fácil, que habrá que hacer sacrificios ¡pero debemos empezar a hacerlo carajo!  Nos están jodiendo con el cuento de que vamos a ser como Cuba  ¡Coño! hagamos lo que hizo Cuba entonces!  Conversemos con nuestros aliados del sur, a ver cuantos de ellos están de verdad  dispuestos a darnos apoyo. Ante la decisión que habrernos de tomar, para saber con que contamos. A partir de allí, establezcamos una economía de guerra,  sincericemos a nuestros productores, sobre todo los medianos y pequeños. Socialicemos las maquinarias de trabajo agrícola como prioridad para el estado. Establezcamos planes de producción agrícola según nuestras necesidades básicas alimentarias, sustituyamos todas las exportaciones no elementales, induzcamos a reorganizar nuestros hábitos alimentarios, controlemos la administración de los recursos y establezcamos prioridades de inversión.  Carajo si queremos patria, debemos ganárnosla. No esperemos que nos la regalen, o nos la cedan, eso no es viable ni sustentable, mucho menos digno. ¿Que esperamos? ¿Estar débiles, no tener el suficiente apoyo popular, que nos aniquilen poco a poco?  Existen momentos en los cuales la duda nos hace perder. Aceleremos esa buena idea de conformar la milicia obrera, pero que no sea obrera nada más, que se active a todo aquel venezolano que esté con este proceso y quiera entrenarse en el manejo y uso de las armas de guerra de la patria y en prepararse en tácticas de combate asimétrico, en el desarrollo, comprensión y manejo del campo de batalla según condiciones de la geografía, el tipo de suelo, las condiciones nuestras y las del enemigo. Eso es básico para sobrevivir como nación libre.
     Esto que digo, no es retorica ni romanticismo. Es una simple reacción lógica al panorama que se nos presenta.  Si seguimos haciéndole el juego al enemigo. Si la impunidad reina por temor a sancionar a los agentes del sionismo yanqui, lo que pasará es que nos debilitaremos al punto en el cual la inacción nos aniquilará. De nada sirven los desarrollos humanos alcanzados, las viviendas, los empleos, la garantía de alimento, los corotos que vendamos barato al pueblo. Si no fortalecemos la conciencia y la comprensión del momento por parte de ese pueblo.  No crean que el resultado electoral del mes de abril sea por que el pueblo desertó por convicción hacia la derecha. No, fue la propaganda dirigida, manipulada y cargada de terror, odio y temor que indujo una reacción tipo zombi de amplios sectores del chavismo y del pueblo favorecido por las políticas del gobierno.  Cuidado con el manejo sicológico que nos imponen a diario. Es una táctica de desgaste y cansancio.  Lo que tenemos que hacer, hagámoslo ahora. Empecemos a apretar  el paso a sacar enemigos de la acción, de momento con la aplicación de las leyes. Después que digan lo que digan, que acusen lo que acusen, total, ya nos venden como dictadura. Pues dictémosles las normas de una nueva sociedad.
(*)Abogado Bolivariano con patria por ahora

Facebook, Javier Monagas Maita
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