El planeta, la vida y la humanidad, necesitan del aporte de todos nosotros para rescatarlos y salvarlos de las garras del capitalismo sionista explotador e inmisericorde. Es ahora o nunca.
lunes, 20 de agosto de 2012
No es contra el árbitro, es un ataque al pueblo directamente (Lo que ocultan los enemigos internos)
Javier Del Valle Monagas Maita (*)
Está más que demostrado que la burguesía. Que es lo mismo que decir, el imperio, el sionismo, la oligarquía, no respeta las reglas del juego cuando estas les son contrarias. Así el imperio desconoce el orden jurídico internacional, cuando se le concede asilo a una persona y va contra sus pretensiones particulares. Igual cuando el CS de la ONU, le niega la patente de corso para hacer en Siria lo que hicieron en Libia. Entonces el derecho al asilo pierde vigencia, de igual manera, la soberanía e inviolabilidad del territorio de una nación deja de ser legítima, cuando sus riquezas o su posición geo estratégica son apetecidas por las elites criminales que gobiernan las potencias militares.
En términos de democracia. La burguesía asume este sistema, siempre y cuando las reglas le sean favorables a una minoría explotadora y ambiciosa. Cuando es el pueblo quien asume las riendas de un estado y las pone al servicio de las mayorías populares, entonces esa democracia ya no sirve. El estado es obsoleto, y las organizaciones son estorbos. Todo pierde interés y legalidad. Entonces el gobierno y el estado que por medio del voto popular rompe las normas burguesas de dominación, pasa a ser un gobierno y estado forajido. Desde ese momento las fuerzas diabólicas y conspirativas internacionales e internas, enfocan sus baterías de ataque contra ese país. Así ha pasado con Cuba, la URSS, Vietnam, Irak, Siria, Libia, Ecuador, Nicaragua, Venezuela, etc.
El juego de los imperios y sus lacayos mediocres serviles, siempre han impuesto normas de exclusividad en la ostentación del poder. Cuando ese poder se les escapa de las manos, entonces quien lo ejerza, pasa a ser ilegitimo, no importa con cuanto apoyo masivo lo sustente, simplemente la fuerza bruta lo reclama para si y tratará de poseerlo de cualquier forma o manera. No importa derramar ríos de sangre y sembrar los suelos patrios de los cementerios que hagan falta. Es ese el momento en el cual los mercenarios dejan de ser una aberración cobarde y criminal, para convertirse en ejércitos de liberación mantenidos o sustentados de los centros de poder imperial corruptos.
En la Venezuela de hoy, ante la evidente victoria electoral de Hugo Chávez Frías, de la mano del pueblo. Ese clan de títeres del imperio, que es la burguesía nacional y la narco oposición que la representa. Se han propuesto desconocer las reglas del juego democrático y borrar la voluntad mayoritaria del pueblo. Ese es y será siempre su juego: neutralizar al pueblo, volverlo invisible, intangibilizarlo, minimizarlo en sus derechos y negarles el derecho a elegir a sus legítimos gobiernos en base a sus legítimos intereses grupales.
Es la lucha de clases, es la activación de una elite minoritaria y sin verdadero peso real para imponer normas, pero que ha tenido la habilidad para dividir a esa mayoría y ha puesto parte de ella a su servicio en forma de policías, ejércitos y mercenarios paramilitares, con normas redactadas para su beneficio. Esa minoría es la que activa la lucha de clases en contra de las mayorías explotadas.
El ataque al CNE, en Venezuela, ciertamente que no es un ataque contra la institución ni contra el gobierno como tal. No, se trata de una guerra declarada y abierta contra el pueblo que legitimó a ese gobierno y a ese órgano electoral. Esa es la razón por la cual en el golpe de estado del 2002 y el paro económico del 2003, las balas fueron directamente contra el pueblo. Fíjense que no dispararon contra el ejército o contra el palacio de Miraflores. No, los fusiles, las bombas, los actos vandálicos, los camiones de Cerveza en las autopistas regando botellas vacías y lanzándolas al boleo, eran contra el pueblo directamente. Los carros de pasajeros, los buses, los trenes del metro, los puentes destrozados, fueron los del pueblo, los allanamientos ilegales, los asesinatos, fueron y son contra el pueblo. Es la lucha de clases, con unas minorías elitescas al ataque, contra un pueblo. A veces engañados, unos sectores de ese mismo pueblo, se vuelca contra sus hermanos de clases, defendiendo limosnas, dadivas, mendrugos de pan. Otras infiltrándose y delatando. Más veces confundido y en otras circunstancias traicionado por algunos seudos lideres ¿Verdad Ismael? ¿Verdad Teodoro? Verdad Vladimir Villegas? Etc.
De esa manera ese pueblo revolucionario. Obstaculizado por el PSUV, se ve inerte ante la agresión de los bandos interesados en sostenerlo como rehén. Por un lado la derecha pro yanqui, asesina y cobarde, por otro un amplio sector de cómplices de esa derecha infiltrados dentro de las estructuras del poder y de su organización base. Se que muchos se molestan por que dicen que ellos son del PSUV y son honestos, pero más que molestarse, lo que deberían hacer es presionar para una verdadera revolución dentro de ese partido y, poder así sacar a tantas lacras mercantilistas y cochinas que existen allí, dañando lo bueno y lo noble del pueblo revolucionario venezolano. Algunos incautos todavía repiten el disco tonto ese de “preséntame las pruebas” como que las pruebas contra Velázquez Alvaray, contra Aponte Aponte, contra Ismael García, etc. no eran evidentes y la ceguera de una disciplina mal entendida los hacia obviarlas.
Es por eso que le hago el llamado, VOTEN POR CHÁVEZ EN LAS TARJETAS DEL PCV, TUPAMAROS, UPV, pero no en la del partido infiltrado (PSUV). Que pese a que la mayoría de sus militantes de base son honestos, parte de los cargos directivos están contaminados en gran proporción por mercantilistas, enemigos del proceso, que solo piensan en sus intereses particulares. ¿Cuándo se ha dado una discusión seria y abierta dentro del PSUV sobre sus lineamientos internos y sobre la educación ideológica? ¿Díganme en cual proceso interno del PSUV, los gobernadores, alcaldes, o demás funcionarios de jerarquía no manipulan y maniobran para imponer sus fichas. Muchas de las cuales son hermanos, familias o allegados, que ni siquiera tienen una trayectoria política y menos de revolucionarios? Eso yo no lo estoy inventando ¿Dónde está el respeto a los lideres naturales?, donde queda la independencia de las bases respecto a los toletes sectarios que se repartieron al partido para sus intereses particulares?
No pretendo ofender a la gente buena y honesta, pero quien no comprenda y se sienta aludido, siendo inocente, pues, haya el o ella. “El que tenga ojos que vea”
(*)Abogado Bolivariano
javierdelvallemonagasmaita@gmail.com
www.planetaenpeligro.blogspot.com / lo que será
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