Javier Del Valle Monagas Maita
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| Brasil encendido |
En términos sencillos
Los
pueblos tienen un límite. Eso no es
discutible. Incluso se puede decir que
es normal, que cuando se ha perdido toda esperanza, se tenga la disposición de
echar el resto debido a que ya no queda casi por defender. Lo que pasa hoy en Brasil, igual a lo que
pasó en la Venezuela de 1989, y pasa en México, Colombia, etc. Es la reacción de los pueblos jugando su
última carta al todo o nada. Aunque ya están con casi nada. Estar contra la pared, acorralados por la
miseria, por la carencia, por la desidia y por el desconocimiento de los
derechos colectivos de los pueblos, hace que las cargas de odio, rencor,
impotencia, desprecio y desconocimiento se acumulen hasta explotar con
cualquier pretexto. Entonces cuando se rompe el caudal de la paciencia, los
inmorales gobernantes y agentes protectores de la explotación humana, usan la
represión, la agresión y el terror para ahogar aunque sea en sangre y dolor el
legitimo derecho colectivo a una vida decente y a poseer parte de país a que se
pertenece. Un país que es de todos
cuando para repartir las cargas de las obligaciones se trata, pero un país
de minorías cuando de recibir
beneficios se requiere. El pueblo
brasileño tiene razón: hay ingentes
cantidades de dinero para invertir en
estructuras para una elite, pero no hay recursos, cuando se necesita
garantizar viviendas, salud, educación empleo y una vida digna para las mayorías.
Esa es también la realidad de Grecia, España, Portugal, Italia, Irlanda,
Francia, Alemania, Inglaterra, Turquía…
Venezuela está viviendo hoy una situación de
alto contenido explosivo. Podemos decir
que en cierta forma es culpa del gobierno, por incomprensión del fenómeno.
Aunque las causas son de origen político al estar implicados los sectores
importadores de bienes y servicios, los sectores distribuidores internos de
esos bienes, los sectores productivos de alimentos y derivados. Esa decir el
sector económico golpista que desea por cualquier medio el poder para aplicar
la misma reta que en el resto del mundo contra los pueblos.
ASI VA LA
COSA
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| Comida de Venezuela en Colombia. |
Los ¿empresarios? exportadores, piden divisas
para traer las mercancías. Una vez obtenidas éstas, solo invierten una porción
para tal fin. Lo demás lo vierten al mercado negro de divisas, obteniendo
grotescas ganancias sin ningún riesgo. Luego venden las mercancías que si
trajeron en los comercios a precios de mercado negro, burlando así al estado y
al pueblo, en una descarada estafa doble. Pongo un ejemplo actual:
en el sector de repuestos de artefactos de Línea Blanca. En el año 2011,
el gobierno decretó un aumento de salarios en dos etapas. La primera parte del
20% en Mayo y una segunda parte en el 18 de Septiembre de un 10% más. Para el
mes de Mayo, el día siguiente al aumento, los compresores de Nevera de ¼ hp, de
origen brasileño, mexicano, asiáticos, aumentaron de 430 Bs a 650 Bs, luego el
día. Lunes 20 de septiembre, después del
incremento del segundo aumento de salarios del 10%, el mismo compresor pasó a
costar 1165 Bs. Ante la baja demanda del producto, el precio se mantuvo durante
un tiempo. Pero se incrementaron los costos de los refrigerantes (R 12, 22,
134, 049, etc.) y demás insumos para reparación. Algo curioso. Cada vez que la
gente va a comprar esos repuestos, en cualquier comercio del ramo, el
dependiente o dueño del comercio tiene una frase elaborada y lista para decir:
“es culpa del gobierno” o “sigue votando por Chávez” en una clara conspiración
pre elaborada.
En lo que va de este año 2013 y después de las elecciones de abril, los
compresores de ¼ hp, pasaron a tener un incremento de precios a 1800 Bs, luego a 2200 Bs, y en el momento
de redacción de esta nota, el valor del mismo es 3200 Bs. Pongo como referencia
a dos comercios de San Felipe – Yaracuy: Don frio. Av. 6 con calle 11. Refrilaco, cuarta Av., con calle 13. ¿Que pasa con eso? Que para que un pobre que necesite reparar
una nevera normal, tiene que pagar la bicoca de casi cuatro millones de Bs. Y
por allí siguen los costos de Lavadoras, secadoras y aires acondicionados. Cosas como esas están haciendo mella en el
pueblo y los tienen molesto. Sumémosle a esta estafa, la de los precios de la
carne: el gobierno la regula a 20,
30, 35, el kilo, según el tipo. Pero el comercio final, la expende a 95, 100 o
140 Bs. Cuando se pide explicación a las
carnicerías de esa diferencia de precios, exhiben unas facturas del
distribuidor que le venden a Éllos, el kilo a 55, 60 o 70 Bs violando esa
regulación. En la lista de precios al detal en las carnicerías, exhiben los
precios regulados, pero cobran 4, 5 o 6 veces más ese precio, en una danza de
burla al consumidor. Cosa curiosa. La
frasecita de “sigue votando por Chávez”, es la constante cuando el pueblo
reclama ¿Entonces es o no es algo
orquestado? Existe una inestabilidad y una pesadez sicológica en la calle. El
pueblo entiende que hay sectores del comercio que juegan a los escases y a la
inseguridad desde todo punto de vista. No olvidamos el golpe económico, militar
y petrolero del año 2002 – 2003 ¿Recuerdan la frase de marico candidato
perdedor el 15 de abril? “este es un
gobierno temporal, de pasantía nada más” ¿Concuerda eso con la estafa y la
inestabilidad de ahora o no? ¿No es correspondiente con las visitas a Colombia
de esa oposición asesina y sanguinaria, con los narco paramilitares en
Venezuela y con las estrategias del asesino Uribe Vélez? Pero el pueblo también
entiende que el gobierno debe ser más creativo, contundente y aplicar la ley a
los ladrones del comercio. Ojo. La respuesta a estos abusos es urgente. Se resienten la impunidad y la falta de
respuestas de algunas instituciones del estado. Las que están más llamadas a
dar respuestas como la Fiscalía, Defensoría Del Pueblo, Tribunales. Son los que
están actuando con mayor irresponsabilidad y mora. Sin ánimo de alarmar. Pero existe un clima de desconfianza e inseguridad jurídica en el
país respecto a las actuaciones del sistema nacional de justicia en todas sus
instancias. Esa es una de las causa de la actual violencia física. Si un ciudadano no encuentra solución a su
problema legal o de violación de derechos por los canales legales de justicia,
entonces apela a la justicia propia. No
puede ser que un asesino que tenga varios homicidios en su haber, ande libre en la calle y
cometiendo mas crímenes ¿Quienes se
benefician y se lucran de ese negocito? Si la pena por homicidio es superior a quince años ¿Cómo es
eso que un mismo delincuente es capturado por ese delito, luego sale libre,
reincide y luego vuelve a salir y hasta amenaza a los familiares de la victima
y a los testigos para que no rindan declaración y relaten los hechos? ¿Es que
no se conoce esa realidad en el país? ¿Cómo un juez se va agarrar de un
tecnicismo leguleyo, para liberar a un criminal y muchas veces reincidente?
Muchas de las cosa que pasan hoy en Venezuela, es producto de la impunidad, del
trafico de influencias, del tarifado de la justicia que sanciona al que no
posee dinero y libera al que tiene capital, de la misma inconsciencia de los
funcionarios que actúan mas por sus intereses económicos y personales que por
aplicar la justicia con equidad y responsabilidad. No son pocos los casos así. Al contrario, es
una generalidad. Las excepciones lamentablemente son los que actúan con decoro
y responsabilidad y eso es de
conocimiento público. Las apariencias
que se cuidan no son para auto respeto y estima. No, solo son para seguir
delinquiendo en el tráfico de decisiones .y tener confiabilidad para la
maniobra de corrupción nada más.
Lo
cierto de toda esta madeja de asuntos, es que hay malestar público. Hay molestias. Se están tomando decisiones. Pero deben ser
reforzadas por cambiar los métodos de selección del personal que asume las
responsabilidades. Por ejemplo. Celebramos la decisión de designar a Samán en INDEPABIS,
¿Pero cual es el criterio para escoger al personal de apoyo? Acuden al PSUV,
allí, entra en juego el amiguismo, el compadrazgo, los favores por diferentes
causas y al final, lo que menos priva es el compromiso de servicio y la
responsabilidad con un deber y una causa. Por
empecemos por el mismo asunto de
la calidad y cualidad de quien recomienda y todos tristemente conocemos
el asunto de muchos liderazgos dentro de ese partido y su real compromiso con
cosas diferentes al deber ser. No me vengan a acusar de escuálido.
Afortunadamente mi trayectoria resiste esa absurda acusación. Pero la realidad está allí y el resultado de
los intentos anteriores por acabar el mal fracasa por esa razón. Mientras tanto el pueblo sufre y paga las
consecuencias de los fracasos y los vicios.
Revolución es cambio, acabar lo viejo, más aun si es dañino. Y la
impunidad, complicidad e inoperancia es mal del pasado y del presente.
(*) Abogado
por la patria
http://planetaenpeligro.blogspot.com/
lo que será
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