Hay que volverse ladillas, hasta que caiga la mascara, repetir, repetir la verdad

Javier Monagas Maita
La bajeza moral ética y profesional de quienes conforman los organismos internacionales, en su mayoría; es en verdad un espectáculo bochornoso. Mirar a la secretaria de estado y al presidente de estados unidos hablar de derechos humanos, mostrando para disuadir el poderío militar sanguinario que poseen, que han utilizado innumerables oportunidades contra naciones cuyo delito principal es tener como gobierno una dictadura impuesta precisamente por esa nación imperialista, o por tener en su seno riquezas que envidia y apetece ese mismo imperio. Esta aberración conductual, hay que repetirla millones y millones de veces, hasta que los incautos la asimilen y a los depredadores se les caiga la mascara.
Cuando los asesinos invasores sionistas de estados unidos o Israel, masacran pueblos indefensos, los órganos mundiales de Derechos Humanos, la Corte Internacional, la OEA, la ONU, etc. Se limitan a hacer ligeros comentarios y críticas débiles nada más. Las ciudades destruidas, las vidas cegadas, los bloqueos, las prisiones a cielo abierto, las torturas, los muros de concreto para robarse tierras ajenas, o los muros fronterizos que se convierten en largos paredones de fusilamiento; no merecen mayor atención por parte de los funcionarios pagados por el dinero inorgánico imperialista. El presidente G W Bush, con una mentira como excusa, ha asesinado indolentemente a mas de un millón trescientos mil (1.300.000) iraquíes, ha envenenado los suelos, contaminados las aguas de esa gran nación y ningún órgano internacional de justicia o de Derechos Humanos se pronuncia seriamente. El delincuente Benjamín Netanyahu, masacra al pueblo palestino, cada vez que se le irrita una lombriz en el ano. O cada vez que un maldito sionista necesita un terreno para una casa o para un burdel; se hace una ligera alharaca en la ONU, el gobierno Sion yanqui veta alguna débil decisión y los muertos y despojados pasan al olvido. Se que estas cosas son archí conocidas por muchas personas, pero son ignoradas o tergiversadas por otras, y por eso hay que martillarlas a diario, otra, otra, y miles de veces, hasta que la verdad se imponga.
El sionismo capitalista es una aberración con forma religiosa que vive de la muerte y el dolor de los hombres y mujeres que poseen algo que ellos envidian y que para tenerlo, no les importa matar.
Esos órganos títeres, son muy pesados y torpes para reaccionar contra los crímenes que comete el sionismo yanqui. Pero muy ligeros cuando necesitan sancionar a cualquier gobierno o país que es apetecido por la miserable avaricia de sus amos sionistas asesinos y ladrones. ¿Qué la CI, quiera actuar contra libia y el gobierno , no es de extrañar. Lo mismo hicieron contra Milosevic en la extinta Serbia Herzegovina, pero se hicieron los locos con los crímenes que cometió la OTAN, los cuales terminó pagando el reo Milosevic.
Cobra nuevamente importancia los ejemplos de Cuba, Vietnam y Corea del Norte, a los que se les suma ahora Irán. Precisamente estas naciones libres, que cuentan con pueblos organizados y fortalecidos con sus gobiernos, son los que han resistido los embates del imperialismo sionista yanqui y sus lacayos y ¡oh lotería| están sancionados y acosados por esos organismos chantajistas Y serviles ¿Qué casualidad? Nuestra Venezuela está siendo amenazada de forma directa por ese imperio maldito, pero existen algunos errores políticos que fortalecen a la oposición cómplice interna e impiden una mayor fortaleza del pueblo con su gobierno. Esto es por culpa de la derecha infiltrada dentro del proceso y que estorba al fortalecimiento de este nexo. Es decir existe una identificación popular con el comandante presidente, pero algunos intermediarios interesados, sabotean este vínculo, amen de los errores propios del presidente. Pero con todo y eso, nos resteamos con el proceso y frente al imperio más aún.
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