Javier Del Valle
Monagas Maita
Muchísimas
veces hablamos, decimos, acusamos y peleamos contra el imperio ¿pero que, o
quienes son el imperio? ¿Son acaso los
pueblos de Estado Unidos y de Europa “el imperio”? No señores, el imperio no
son los pueblos, ellos son los rehenes, las victimas, los instrumentos. El imperio, es esa
madeja de monopolios económicos petroleros, farmacéuticos, automotrices,
banqueros, industrias armamentistas, narco tráfico, politiqueros empresarios,
agroindustrias, químicos, electrónicos, mineras, etc. Puede parecer como muchos, pero en realidad
son pocos comparativamente con la población mundial y con su poder económico.
El imperio son todos los
beneficiarios del sistema capitalista actual y que hasta de la muerte y las
guerras hacen negocios. No es que se
pretendan dueños del mundo: son dueños. Todas las reglas internacionales, la
conformación de los órganos internacionales, las reglas de juego económicos,
las guerras, los precios de las materias primas, las acumulaciones de
capitales, los valores monetarios, las monedas de transacción internacional, la
producción de alimentos, etc. Pasan por la decisión de ese clan mafioso.
Incluso hasta las epidemias virales son decisión de esos criminales.
Dado lo anterior, considero
que en el mundo existe una gran cadena de complicidad y de intereses atados a
los de los genocidas imperialistas.
Veamos si decimos que enfrentaremos al imperio, lo primero que debemos
hacer es desligarnos de lo que lo representa. Es decir los grandes monopolios
asesinos y envenenadores de la humanidad y que son instrumentos de dominación y
explotación. Desde Coca-Cola, pasando por Monsanto, siguiendo por las
petroleras Sion yanquis, etc. Toda lucha anti imperialista no solo debe
denunciar, si no atacar los intereses de los monopolios. De lo contrario, es
una lucha falsa y engañosa
El petróleo es la fuente de
energía más contaminante y representativa del poder capitalista imperial. Toda
la economía ficticia del mundo está sustentada sobre el petróleo. Mas veo como
hipócritamente se habla de un nuevo orden económico mundial con mayor
incidencia en lo ecológico a los fines de salvar al planeta. Pero
paradójicamente cada año se incrementa la producción y quema de petróleo
¿entonces donde está la sinceridad del discurso? Ah, y de paso se vende
petróleo a la nación rehén del imperialismo para que tenga energía barata para
mover sus maquinas de guerras y su economía agresora.
Por ejemplo: Venezuela es una
nación productora de petróleo, que está bajo ataque descarado, hasta con
mercenarios pagados con fondos del gobierno de USA (del poder imperialista),
por que ese poder desea para si, todas las reservas de energía que
tenemos. Siendo eso comprobado ¿Por qué
no vendemos toda nuestra producción petrolera a China u otros compradores?
Tenemos una red de venta de gasolina en USA y refinerías de petróleo ¿Por qué
no vendemos esos activos y rompemos nexo económico con el enemigo?. Si sabemos que el petróleo es uno de los
agentes contaminantes más activos que existen, ¿Por qué no se ha invertido en
desarrollar otro tipo de energía menos dañina y a la vez más económica? ¿Es que
solo los países mal llamados desarrollados pueden hacer investigaciones
científicas?
Nuestro problema básico es
que en Venezuela el capitalismo que existe es un capitalismo de segunda,
parasito. Unos seudo empresarios que de emprendedores no tienen nada y que
cobardemente son incapaces de invertir en el desarrollo de tecnologías y avances
científicos por que simplemente no tienen la suficiente capacidad intelectual y
suficiente orgullo para emprender la búsqueda de sus propias producciones
originales. Solo son compradores de franquicias y chulos del estado. Si a eso
sumamos que esas malayas calamidades empresariales siempre poseyeron en segundo
grado el poder en el país (por que en primer grado lo tenia el Sion imperio) y
por lo tanto solo acataban instrucciones foráneas. Son incapaces de tener
rasgos o visos de independencia y soberanía y por eso son tan fáciles de comprar
y de traicionar a su país.
Es natural que en todo
proceso de cambio, se tengan que sufrir
algunas privaciones, pensar lo contrario sería iluso. Pero si a ver vamos es
desde esa perspectiva que se desarrollan las tecnologías y desarrollos propios
necesarios para avanzar con independencia. Allí tenemos el ejemplo de Irán, en
tan corto tiempo, solo por nombrar uno. Yo no dudo de la buena fe y la buena
intención del líder Chávez y de ahora Nicolás Maduro. Pero si a ver vamos, la
ayuda al pueblo debe ser una ayuda con ciertas limitantes y con ciertos
condicionamientos, explico: por ejemplo agricultura. Es bueno que se subsidie y
que se estimule la producción nacional. Pero los fondos destinados a tal fin
deben de ser muy bien vigilados y disponer de personal lo suficientemente
capacitado y comprometido con los objetivos deseados y con el desarrollo
ideológico. Si ideológico, no nos deben importar los lamentos del enemigo y sus
títeres internos. No podemos, ni debemos negar, que con el proceso económico, político
y social, también perseguimos un compromiso ideológico que sirva de base de
sustento moral a la nueva sociedad en construcción, de no ser así ¿Para que
hablamos de socialismo? Independientemente de las condiciones blandas del
financiamiento agrícola, ese dinero invertido debe ser recuperado, a menos que
sucedan situaciones fortuitas imprevistas.
Es necesario reclasificar los suelos y planificar la producción mas
estratégica y necesaria para el país. Es decir procurar el auto abastecimiento
en los rublos más críticos e importantes para la dieta general del
venezolano. no permitir que el sector
privado que no participa en el proceso de producción agrícola, se involucre y
beneficie del mismo, sobre todo en la fase de colocación del producto, pues es
sabido que ese sector negligente, paga precios irrisorios al productor, para
luego revender a precios inflados, por ejemplo Empresas Polar entre otras además de que sobre explota las
semillas como el maíz, al cual reseca en corazón, lo utiliza para las cervezada
que venden como cerveza (ESTAFA) y luego el despojo o bagazo, lo venden como harina pre cocida y de la cual
también obtienen parte de los alimentos para animales.
Si podemos existir y
subsistir sin el imperio y sus lacayos. Pero para eso debemos sincerarnos,
adaptar el cuerpo de leyes y otras instancias oficiales para tal fin,
seleccionar muy bien al personal que actuará como garante de las metas y
enfrentar el consumismo enfermizo promocionado desde los medios de comunicación
al servicio del Sion imperio. Es asunto
de voluntad, capacidad, decisión, coraje. De rodearse de los más capaces,
desechar los compadrazgos, amiguismos, clientelismos políticos, familiares y
barraganes. De no ser así. Solo estamos aplicando verbo insustancial y hechos contrarios.
En definitiva, si somos anti
imperialistas, no podemos ni debemos alimentar los tentáculos del monstruo. Eso seria ir
contra nuestras propias leyes naturales de supervivencia, al enemigo se le
debilita, no se le fortalece...
(*)Abogado Con
Patria
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