¿Elucubrando fantasías? o previniendo lo posible

Javier Monagas Maita

Haciendo un ejercicio mental en base a lo hipotético y lo posible de esa arma que han denunciado por allí (HAARP), capaz de alterar el equilibrio de las ondas electromagnéticas de la ionosfera, que a su vez influyen sobre el clima y la estabilidad de la Geosfera e hidrosfera (La Geosfera corresponde a la porción sólida del planeta. Técnicamente, la Geosfera sería la Tierra misma, sin considerar la hidrósfera ni la atmósfera). Siendo que la tierra es un todo integrado, funciona con un equilibrio muy delicado, que si se altera produce una conmoción general que se refleja en mayor grado donde incide más la alteración, algo parecido a cuando el cuerpo humano se le inflaman las amígdalas, produce una fiebre general en el cuerpo y un dolor local en las glándulas nombradas.
Ahora bien dado que es insistente el comentario sobre la existencia de esas antenas, ej. (http://www.google.co.ve/#hl=es&source=hp&biw=&bih=&q=haarp&aq=0s&aqi=g-s1g2g-s5&aql=&oq=HARRP&fp=1 ) capaces de producir esas alteraciones a voluntad de su o, sus operadores, incluso en la web hay videos y narraciones sobre tal cosa, si se comprueba su certeza, entonces estamos ante una situación de agresión general a la humanidad, que merece una respuesta inmediata y contundente. De ser cierto, como se denuncia que esas alteraciones están siendo utilizadas como arma de ataque, significa que el país que lo hace, es más que terrorista y criminal. Se ha ganado recibir una respuesta armada contundente a su acto agresivo. No puede permitir la humanidad que se juegue con un elemento que es potestad de uso para todos por igual como es el planeta, su clima y su estabilidad, que se debe respetar como un derecho colectivo de primer orden, que no puede ser alterado a capricho de unos pocos homicidas con fines políticos y económicos
Cualquier país tiene derecho a destruir esas instalaciones estén donde estén. Una cosa como esa debe ocupar una superficie muy grande y es de fácil detección por los satélites de China, Rusia, Japón u otra nación con la tecnología espacial adecuada. Repito, de confirmarse esa existencia, hasta un piloto furtivo, está facultado para atacar y destruir esas diabólicas instalaciones. Si el imperio sionista yanqui sanguinario, se abroga la potestad y el derecho de atacar a cualquier nación bajo el pretexto o la sospechas de poseer armas de destrucción masiva, ¿que no se les puede hacer a esos malditos genocidas por su violación flagrante de todo derecho internacional y humano? Por allí se ven en internet unas instalaciones y unas estructuras que supuestamente son las antenas de esa demoniaca arma, pero en realidad no es comprobado. Pero de ser cierto se debe actuar: lo cierto es que se están sucediendo terremotos, maremotos, tsunamis, sequias y lluvias excesivamente intensas, en lugares de la tierra, que son muy sospechosas y que de alguna manera rivalizan o son de interés del imperio. Llama poderosamente la atención que el terremoto de Haití, no terminaba y, ya un portaviones estaba en sus costas con supuesta ayuda humanitaria, - que no tan humanitaria -, estaba cargada de marines que se apropiaron del país, su aeropuerto, la casa presidencial, con una logística, que solo es posible haberla preparado mucho tiempo antes del suceso, para su implementación ¿son adivinos los yanquis? O ¿tuvieron injerencia en el “no tan natural suceso”? Así mismo existe una cadena secuencial de movimientos telúricos en Irán y China muy oportunos, para generar caos en esas naciones. De la misma manera China, desde que empezó a avanzar tecnológica y económicamente, ha sufrido unas sequias y unos inviernos muy severos; sospechosamente severos, lo mismo Rusia ha visto mermada su producción agrícola en casi 50% por una sequia muy irregular.
En todo caso, estemos vigilantes del cielo. Si esas luces boreales que dicen aparecen cuando se hace uso de esa arma aparecen y luego hay una calamidad, la cosa tendría sentido ¿no? Es solo por aquello de: “no existen, pero de que vuelan, vuelan”. Un arma de esa índole convertiría a la humanidad en rehén de esos carniceros, asesinos, sionistas, yanquis, judíos y católicos y eso no es posible permitirlo de ninguna manera en ningún tiempo. Cualquier riesgo vale la pena.
El imperio sionista, tiene en su haber agresiones y despojos en todo el mundo, contra poblaciones inocentes y débiles, en la mayoría de los casos, incluso se auto agreden para tener la excusa. Ha sembrado los suelos y aguas de esos países de veneno, destrucción y últimamente de radiaciones degenerativas del cromosoma humano. Es más, utiliza las guerras como excusa para deshacerse de sus desechos tóxicos de uranio empobrecido; antes lo hacían clandestinamente, sobre todo en los mares de Somalia, o pagaban para usar los basureros que imponían en países pobres. Ahora masacran, invaden y los dejan tras de si como un penoso y criminal recuerdo de su maléfica presencia.
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