Pongamos los pies sobre la tierra J

Javier Monagas Maita
El imperio terrorista sionista yanqui, no va a cesar en su acoso sicológico y material contra las naciones que estamos rompiendo sus lazos de dominación. Si tomamos en cuenta el enfrentamiento contra la extinta URSS y contra Cuba, es fácil deducir lo que será contra Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua. En el caso de la URSS, no fue que el imperio derroto y ganó la batalla; es que las inmoralidades de corrupción y privilegios elitescos, dieron al traste con ese sueño bolchevique de socialismo, no se derrotó al socialismo, se derroto a un capitalismo de estado y a una dictadura elitista. El pueblo no asumió ese proceso como suyo, por que se lo arrebataron.
En el caso venezolano, la corrupción está haciendo el mismo efecto y no es desde 1999 para acá, esa calamidad ya existía con Adecos y Copeyanos, esas lacras ya habían entregado la soberanía e independencia a las elites yanquis sionistas. Específicamente en el llamado sector revolucionario de izquierda, descubrimos después que muchos de los que se calificaron como lideres, estaban tan podridos por la corrupción como los lideres de la derecha punto fijista. Es así como se encuentran hoy defendiendo los intereses de la burguesía y del imperio sionista asesino a bagazos humanos como Teodoro Petkof, Pompeyo Márquez, Américo Martin, Douglas Bravo, Gabriel Puerta Aponte, a quienes se le suman después otras alimañas como Ismael Gracia, Walter Márquez Rondón, Carlos Melo, etc.
Afortunadamente la mayoría popular se casó con la idea de una revolución igualitaria, de justicia y anti imperialista, pero la marcha del proceso ha sido más lenta del esperado, sin dejar de reconocer que ha habido avances. Esos avances, han acelerado el proceso de ataque e injerencia imperial en contra del gobierno y pueblo venezolano. Esa injerencia se encuentra avalada por los miserables que ayer entregaron al país y que cobran hoy en dinero inorgánico, para tratar de revertir la voluntad y conquista popular de su independencia.
Las fuerzas terroristas imperialistas, cuando no logran sus objetivos planificados, tienden a desesperarse y a perder las apariencias. Habiéndole fallado todas sus intentonas, han vertido sobre el territorio nacional millones y millones de dólares inorgánicos, para comprar a ese ejercito de apátridas y gusanos traidores, a la vez moviliza desde afuera a sus huestes de infelices cómplices, para cerrar un circulo de ataque externo e interno. Así lo han hecho contra Cuba, y lo hacen contra Venezuela, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, por eso el golpe de estado en Honduras, y la compre del presidente mediocre y traidor del Salvador, Mauricio Funes (Fuñes).
Nuestro problema en Venezuela ha sido, que pese a que las transnacionales que gobiernan en USA, que son las que tienen el poder real, nos atacan como país, pueblo y gobierno; les permitimos que hagan negocios aquí, que además de obtener grandes ganancias, desestabilicen, especulando con los bienes, servicios y productos que comercializan.
Nuestra nación no aplica la reciprocidad al imperio maldito yanqui, mientras ellos prohíben ventas de repuestos para las naves y ramas que nos vendieron en el pasado, nosotros les seguimos enviando petróleo y otras materias primas; mismas que usan para desarrollar acciones en nuestra contra.
La derecha sanguinaria yanqui, y los gusanos desertores de cuba y Venezuela, han unido esfuerzos para atacar simultáneamente a Cuba Y Venezuela. Ileana Ross Lethiner, es el nombre de la basura gusanoide que en este momento, comanda la arremetida desde Miami, junto con el asesino protegido del gobierno yanqui Luis Posada Carriles. Ellos se aprovechan de la debilidad el sistema económico interno en USA, para aprovechar el desespero e impulsar una acción descabellada por parte de los que controlan el poder en esa nación contra los países que nos les salimos de su dominio perverso. Es la es la razón por la cual infelices cobardes como Insulza, y su combo de la CIDH, unen coros para repetir al unisonó con la corrompida prensa internacional dependiente, consignas, mentiras y amenazas contra Venezuela, su gobierno y su pueblo.
Creo, que la respuesta debe ser la de profundizar el proceso, atacar a la corrupción cómplice del enemigo, expulsar a las transnacionales sionistas ladronas y explotadoras, promover la producción de bienes y servicios internos, para sustituir los del imperio y convertir definitivamente a la población revolucionaria en un gran ejercito popular armado. Solo así detendremos las apetencias terroristas Sion yanquis. Pero algo si tenemos que tener claro quienes queremos patria libre: no será de gratis. Tendremos que pelear por ella, jóvenes, viejos, hombres mujeres, no solo de palabra y letra. Es por eso que debemos entrenarnos en el manejo de las armas y en estrategias de guerras no convencionales. Esto no es paranoia, es la única salida ante la conducta asesina y terrorista del poder sionista en USA tan conocida mundialmente y de la cual sobran ejemplos. No podemos ni debemos vivir en una patria arrodillada ni sometida. Debemos ser libres y soberanos a cualquier precio
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